viernes, 29 de octubre de 2010

Intervención Nº2: Rotulando la FADU

Crisis docente

   En Agosto de este año fueron rechazados 253 cargos docentes, que sumados a los que habían sido rechazados en los años anteriores suman 553 cargos que no son reconocidos.
   La FADU funciona mediante un sistema de puntaje que establece que los cargos reconocidos en cada cátedra se calculan en proporción directa al número de alumnos inscriptos definitivamente en esta. La relación entre cantidad de docentes y de alumnos planteada por el sistema vigente no da cuenta de la dinámica de trabajo de nuestra Facultad y esto genera que se vuelva excesivo el número de alumnos a cargo de cada docente, dificultando las correcciones que tanto necesitamos. Para solucionar estas falencias se incorporan ayudantes que no son reconocidos como tales por la universidad y por lo tanto no son remunerados por su trabajo.
   Un tercio del total de los docentes cobra regularmente, otro tercio cobra por debajo del cargo que ejerce, es decir, es subrentado. El tercio restante, no cobra: es ad-honorem. Si tenemos en cuenta que para ser docentes deben pasar por 7 años de ayudantía ad-honorem,  llegar a docentes y seguir sin cobrar parece, por lo menos, un chiste de mal gusto. El funcionamiento de nuestra facultad depende de la voluntad de cientos que trabajan gratis.

   Desde que explotó este año (otro más) el conflicto se lograron la recuperación de 226 cargos docentes. Debemos continuar en la lucha por el reconocimiento de los 327 cargos restantes e impedir el acostumbramiento a la problemática que se acarrea históricamente.

    En paralelo a ésta situación se produce otra intrínsecamente relacionada: el de los concursos docentes.  Este sistema debiera permitir el acceso a diferentes cargos dentro de la docencia universitaria, pero gracias a las irregularidades y la disfunción del sistema burocrático faduense, esto no es así.
Como estudiantes somos testigos de las voces de nuestros docentes: “hace 2 años gané un concurso y desde entonces el mismo no fue reconocido, sin embargo hay alguien ocupando mi puesto CONCURSADO”. Es decir que esa persona fue electa “a dedo” para ese cargo.

    Rotulamos la FADU, para exponerla, para plantear la problemática,  no naturalizar esta situación, ni olvidarla una vez que pasaron las elecciones. Para que seamos concientes que el trabajo se paga, y que el prestigio académico no puede basarse en el abuso laboral y la explotación.

   Nuestro objetivo es plantear interrogantes, que las realidades de la facultad dejen de sernos indiferentes, olvidadas. Depende de nosotros cambiarlas. El debate y el cuestionamiento deberían ser prácticas cotidianas, formas de comunicación y de intercambio de opiniones que nos acerquen, buscando lograr la unidad estudiantil.
 Como juventud somos la posibilidad de cambio. Creemos que debemos tomar el desafío en nuestras manos.

martes, 19 de octubre de 2010

Intervención nº 1 - Trabajo en grupo vs. trabajo en equipo

         Como estudiantes de esta facultad prácticamente todos los días trabajamos en conjunto con otras personas. Nosotros confiamos en el trabajo colectivo como modo de trabajo. Sin embargo creemos que debemos desnaturalizar y ser críticos del modo en el que desarrollamos el trabajo colectivo en nuestros ámbitos de estudio.


QUE EL TRABAJO COLECTIVO NO SE QUEDE EN EL TALLER.

Trabajar con otros es la dinámica más común y naturalizada que tenemos. Sin embargo creemos que la mayoría de las veces trabajamos en grupo... pero no en equipo. La necesidad de marcar esta diferencia surge de nuestra experiencia en el día a día mientras cursamos materias de diferentes carreras de la FADU: vemos un marcado individualismo incluso en los momentos de trabajo colectivo, en los cuales muchas veces se termina compitiendo entre los propios compañeros para ver quién tiene la mejor idea.

Es cierto que nadie nos enseña a trabajar en equipo, y que por el contrario este mundo nos incita continuamente al individualismo; no nos explican que no es juntarse a discutir para ver quién grita más fuerte ni que un par tengan que ponerse el equipo al hombro por los demás.

Si bien no creemos que sea necesario hacerse amigo de nuestros compañeros para poder coordinar un trabajo, entendemos que se precisa crear un vínculo de respeto, humildad, consideración, valoración por el otro y sus ideas, basado en el diálogo y la coordinación.

Por todo esto creemos que cuestionar la idea naturalizada de trabajar en grupo y poder corrernos de ese lugar son los primeros pasos para dejar de lado el individualismo y llegar a los equipos que necesitamos para que el trabajo sea realmente colectivo.


EL TODO ES MÁS QUE LA SUMA DE LAS PARTES.
Reflexiones para el trabajo en equipo

¿Trabajar en grupo o en equipo?

El grupo es un conjunto de personas que  hacen todos el mismo tipo de trabajo y son autónomos entre sí. Dependen de un líder o jefe, pero no necesariamente de la relación entre los pares.
El equipo tiene sustento, sobretodo, en la relación interpersonal entre sus integrantes y responde siempre en su conjunto. Lo más necesario es aprender a escuchar. Aprender a escuchar al otro, estar abierto, sin prejuicios, sin descalificar o cerrarse en uno mismo y la idea que uno tiene sobre lo que hay que hacer. No sólo para que el trabajo sea verdaderamente colectivo (es decir, basado en el intercambio y la creación en conjunto), sino también porque esto es lo que hace que el trabajo en equipo sea una experiencia única: nos permite crear juntos, aprender de nuestros compañeros, nuestros pares; acercándonos y fortaleciéndonos como comunidad de estudiantes. Trabajar en equipo es una forma de socializar (es decir, compartir) el conocimiento, permitiendo que llegue a otros y estos crezcan, así como los saberes que otros tienen y nos brindan, nos hacen crecer a nosotros.
Escuchar es importante para darse, como grupo, el lugar y el tiempo a que todas las personas que lo conforman participen y puedan aportar algo de lo que saben o creen; para que todos y cada uno se puedan apropiar del trabajo que están haciendo, defendiendo y respondiendo por él  de manera conjunta y coherente: así nos volvemos más fuertes como grupo, y como personas. Escuchar, es la llave para poder crear ese vínculo con los demás que hace que podamos comunicarnos, intercambiar, opinar y sentirnos cómodos para trabajar, sin la necesidad de conocer previamente a la otra persona ni que exista una relación de amistad. Estar atentos para encontrar las ideas y pareceres que nos unen, pudiendo hacer a un lado las cosas que nos distancian.
Saber confiar en el otro, delegar tareas, siendo a la vez responsables con la parte que nosotros mismos nos comprometimos a hacer, pero sintiéndonos seguros de que detrás hay todo un grupo de personas en quienes apoyarse.


lunes, 4 de octubre de 2010

Elecciones en La FADU (del 4 al 9 de Octubre)

Quienes somos
Somos un grupo de estudiantes  que forma parte de la Corriente de Izquierda Independiente Julio Antonio Mella, La Mella. Nuestro objetivo primordial es promover la participación y el interés de los estudiantes, tanto por la realidad de la facultad como lo que sucede fuera de ella. En este sentido creemos que el estudiante, como tal, debe adoptar como propia la facultad, asumiendo un compromiso con la misma, porque es suya. Creemos necesario un movimiento estudiantil activo, para llevar adelante y lograr el cambio de nuestras condiciones universitarias. Consideramos la cultura y su transformación como herramientas fundamentales para impulsar y lograr los cambios que buscamos. 


Situación Actual
Este año se produjeron dos hechos conflictivos. Por un lado la elección del Decano, que se resolvió después de 8 meses en donde el sector de Sorín (ex-Decano) y Reforma (Franja Morada-UCR) se peleaban por el decanato. Gracias a la movilización estudiantil, fomentada desde la conducción del CEADIG, se logró un compromiso por parte del nuevo decano Arq. Cajide para impulsar una serie de propuestas tales como: la creación de las Juntas de Carrera, garantizar el Curso de Verano y la creación del Comedor Universitario. Del mismo modo, ante la movilización se han logrado recuperar 182 de los 553 cargos que se habían rechazado. Entendemos que conseguir los cargos faltantes y el cumplimiento del compromiso del Decano deben ser obligaciones para nuestro claustro y que sólo van a lograrse con mayor participación estudiantil.


En este sentido, creemos que a pesar de la buenas intenciones y los logros obtenidos, también es necesario tener una mirada crítica de dónde estamos, cómo llegamos hasta acá y cómo hacemos para seguir avanzando. Entendemos que un Centro que no trabaja para generar espacios de participación directa, que no fomenta la participación de quienes no pertenecen a la agrupación o partido político que lo conduce y que no se mueve con fuerza si no es en época de elecciones o cuando explotan los conflictos termina generando rechazo masivo de los estudiantes perjudicando al movimiento y su potencialidad de cambio.


No olvidamos que la falta de participación es parte de una situación más general, pero tampoco nos conformamos, sino que decidimos cuestionar las concepciones que tenemos naturalizadas respecto a nuestro Centro, para transformarlo en una herramienta más fuerte y que cuente con la participación de más estudiantes.


No podemos decir lo mismo de las intenciones de Coalición y Reforma. Ante el despido de los docentes, ¡ni siquiera sacaron un volante en su defensa! Durante el conflicto del Decano, sólo especularon tratando de sacar una tajada para su propia agrupación. No hay que olvidar que tampoco participaron en la importante lucha llevada a cabo en el 2008 en la cual Estudiantes y Docentes unidos hicieron frente al ahogo presupuestario en una situación muy similar a la actual, acarreada también al 2009 (la destitución de cargos docentes y las políticas destructivas hacia la universidad pública parecieron volverse una costumbre en ésta época del año). Estas agrupaciones en lugar de luchar por el presupuesto, luchan por satisfacer intereses propios, intereses que responden generalmente al sector privado y pretenden el arancelamiento de la facultad pública y gratuita. 


Nuestra Posición 
Desde La Grieta promovemos la participación activa en la elección del CEADIG (órgano de representación estudiantil). Creemos que lo mejor es que te des un tiempo para leer todas las plataformas y reflexionar sobre lo que pasa en la facultad y cuál es la mejor opción para transformarla, buscando así hacernos cargo de nuestro futuro.  Desde La Grieta decidimos no presentarnos a elecciones. Llamamos a no votar a Coalición o Reforma sino a las opciones que promueven la participación estudiantil, la democratización y continuar la pelea por mejorar la facultad, la universidad y la educación pública, laica y gratuita.




La Grieta - Octubre 2010